domingo, 26 de diciembre de 2010

MENSAJE DE NAVIDAD

Como viene siendo típico por navidades; al igual que Papa Noel, Los Reyes Magos o el turrón, si conectamos la televisión a eso de las 21:00 en Nochebuena, y por mucho zapping que hagamos, vemos que el mismo “señor” aparece en todos los canales dando un discurso a la nación.

Estos discursos destacan por ser vacíos y superficiales, pero la mayoría de los años nos suelen dejar alguna que otra “perlita”. Sin ir más lejos este mismo año, su majestad, que recibe de las arcas públicas unos 9 millones de euros al año, amén de sus turbios negocios, ha tenido la cara de pedirnos que apoyemos las reformas necesarias contra la crisis. Es decir, que si es necesario tener que estar puteaos en la obra o en la fábrica hasta los 67 años, bajar el sueldo mínimo, quitar las ayudas a los parados sin prestación de desempleo, pagar por ir al médico o abaratar el despido, pues se hace. Todo sea para que nuestro simpático y campechano monarca y sus colegas, banqueros o grandes empresarios, puedan ampliar sus privilegios.

Debemos recordar que la II República se proclamó tras unas elecciones municipales. En éstas los partidos republicanos ganaron en la mayoría de las grandes ciudades. Así pues, Alfonso XIII, abuelo de Juancar, y que entre otras cosas reinó a la vez que permitió la dictadura de Primo de Rivera no tuvo más remedio que irse por patas.

Actualmente se esta construyendo en España una red de municipios por la III República que no para de crecer; Puerto Real, Casarrubuelos o nuestra vecina Villamalea son algunos de los muchos ejemplos. Desde IU-La Roda nos llenaría de “orgullo y satisfacción” que nuestro pueblo colaborase directamente por la construcción de esta inevitable III República. (El rey, la sangre azul, palacios, reinas, bodas reales, príncipes, infantas… Es todo una tomadura de pelo, que hace que en ocasiones parezca que estemos en la Edad Media más que en el siglo XXI.)

Adjuntamos a este artículo otro discurso de este personaje; que aunque no es navideño habla de la persona que le nombró como sucesor, (por si alguien ha olvidado de donde viene y cual es su ideología).

Salud y República.

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